Marcas chinas:

Historia, evolución y estrategias de implantación en el mercado español

Por Juan Carlos García

Dpto. Marcas de vehículos y Redes de talleres

El crecimiento exponencial de la industria automotriz china en las últimas décadas en Europa lo convierte en actor clave en el ámbito del transporte sostenible.

Analizamos, a continuación, la evolución de las marcas de coche chinas, su contribución al transporte sostenible y su táctica de implantación a nivel nacional e internacional.

Exploraremos las estrategias concretas adoptadas por marcas como BYD, Geely y el Grupo Chery, así como las tendencias futuras en la industria.

20min de lectura

Imagen 1: Ventas de vehículos en España

1

2

3

4

5

Evolución de las marcas chinas

Contribuciones al transporte sostenible

Modelos de distribución

Análisis de casos específicos

Tendencias futuras en la industria

1. Evolución de las marcas de automoción chinas

Del primer desarrollo de la industria automotriz china, en la década de 1950, con la creación de la primera fábrica de automóviles, First Auto Works (FAW), ayudada por la Unión Soviética -con tecnología y licencias soviéticas-, a la apertura económica del país en la década de los ochenta, hubo una gran evolución. Joint ventures con fabricantes como Volkswagen y Toyota permitieron a las empresas chinas adquirir nuevas tecnologías y experiencia.

Imagen 2: Ventas de vehículos electrificados en el mundo

Ya en los albores del siglo XXI, marcas como BYD, Chery o Geely fueron ganando importancia y reconocimiento internacional.

BYD se centró, desde sus inicios, en la producción de vehículos eléctricos (VE), convirtiéndose en líder de esa propulsión. Chery, por su parte, se expandió internacionalmente a través de la creación de plantas de ensamblaje en otros países. Geely, finalmente, destacó por adquisiciones estratégicas -como la compra de Volvo en 2010-, accediendo, de este modo, a una avanzada tecnología.

El papel de China redefiniendo las tendencias energéticas mundiales está cambiando. Fue protagonista en el uso mundial de petróleo -en la última década el país fue responsable de casi dos terceras partes de uso del petróleo- y de casi un tercio del aumento del gas natural, con una posición dominante respecto al carbón. Actualmente, apuesta por energías limpias. Tras el rápido crecimiento de la infraestructura física del país, China ya cuenta con una red ferroviaria de alta velocidad y se prevé una menor demanda en sectores de uso intensivo de energía, como el cemento y el acero.

El papel de China redefiniendo las tendencias energéticas mundiales está cambiando. Fue protagonista en el uso mundial de petróleo -en la última década el país fue responsable de casi dos terceras partes de uso del petróleo- y de casi un tercio del aumento del gas natural, con una posición dominante respecto al carbón. Actualmente, apuesta por energías limpias. Tras el rápido crecimiento de la infraestructura física del país, China ya cuenta con una red ferroviaria de alta velocidad y se prevé una menor demanda en sectores de uso intensivo de energía, como el cemento y el acero.

La consultora PwC afirma que, en 2025, China exportará 800.000 coches a nuestro continente, la mayor parte eléctricos: “En el gigante asiático han optimizado y desarrollado sus productos en el mercado doméstico; les permite producir eléctricos a más bajo coste y disponer de tecnología innovadora”.

La consultora PwC afirma que, en 2025, China exportará 800.000 coches a nuestro continente, la mayor parte eléctricos: “En el gigante asiático han optimizado y desarrollado sus productos en el mercado doméstico; les permite producir eléctricos a más bajo coste y disponer de tecnología innovadora”.

Imagen 3. Tendencias que transforman la industria automotriz

En 2030, la consultora prevé que el uso intensivo de los vehículos y la reducción sustancial de su vida media provocarán una reducción del stock de vehículos en mercados como el europeo o el norteamericano, creciendo, a la vez, el número de matriculaciones. Así, las previsiones en Europa calculan un incremento en el número de matriculaciones en torno al 34%, 24 millones de unidades. En EE. UU., un 20%, 21,6 millones de vehículos. Sin embargo, en China, dado su importante aumento de la población y urbanización, PwC estima un incremento de las matriculaciones -un 30% más, hasta los 35 millones- y del parque de vehículos, que alcanzará los 275 millones de coches en 2030 (ilustración 3).

En 2030, la consultora prevé que el uso intensivo de los vehículos y la reducción sustancial de su vida media provocarán una reducción del stock de vehículos en mercados como el europeo o el norteamericano, creciendo, a la vez, el número de matriculaciones. Así, las previsiones en Europa calculan un incremento en el número de matriculaciones en torno al 34%, 24 millones de unidades. En EE. UU., un 20%, 21,6 millones de vehículos. Sin embargo, en China, dado su importante aumento de la población y urbanización, PwC estima un incremento de las matriculaciones -un 30% más, hasta los 35 millones- y del parque de vehículos, que alcanzará los 275 millones de coches en 2030 (ilustración 1).

2. Contribuciones al transporte sostenible

El crecimiento de las marcas chinas en la electrificación de vehículos contribuye a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, según el informe “World Energy Outlook 2023” de la Agencia Internacional de Energía (AIE).

Las iniciativas de China en transporte sostenible pretenden fomentar la movilidad, reduciendo la huella de carbono, y mejorar la calidad del aire y colaborar en una estrategia de protección al medio ambiente, influyendo, asimismo, en las estrategias mundiales de transporte ecológico. 

Imagen 4: Transición energética

Algunos ejemplos son:

• Implantación de normas de emisiones estrictas para los vehículos, de modo que los fabricantes deban evolucionar hacia tecnologías más limpias.

• Electrificación del transporte público, con un importante número de autobuses y taxis eléctricos en las principales ciudades chinas.

• Expansión de las redes ferroviarias de alta velocidad, reduciendo el uso del vehículo privado.

• Inversión en fuentes de energía renovables como la solar y la eólica para alimentar las redes de transporte.

Imagen 5. Demanda de energía de china

Shenzhen, la ciudad tecnológica del sur de China con 18 millones de habitantes y sede de BYD, ha sido la primera gran urbe del mundo en optar por electrificar su flota de autobuses; lo hizo en 2017. Otras de las principales ciudades en China donde la adopción de vehículos eléctricos ha contribuido a una disminución  significativa en la contaminación del aire son Beijing y Nanjing que, con un rápido despliegue de vehículos eléctricos, han conseguido disminuir considerablemente las emisiones de CO2.

¡Escucha nuestro podcast!

Artículos de investigación

Accede a todos nuestros artículos de investigación relacionados con el mundo de la posventa.

Follow Us